Nicaragua es conocida principalmente por su gente amable, sus hermosas atracciones turísticas y una gastronomía exquisita que deleita a los gustos más exigentes, pero este pedazo de cielo en la tierra brinda además experiencias únicas y extraordinarias.
Enriquecida por su cultura, sus tradiciones y su historia, Nicaragua ofrece volcanes activos donde hasta es posible apreciar la lava, reservas naturales con paisajes encantadores y playas acogedoras.
A continuación, te presentamos cuatros destinos turísticos que te harán amar a esta Tierra de Lagos y Volcanes.
Iniciemos nuestro viaje por Managua, La Novia del Xolotlán, una de las capitales más verdes de Latinoamérica y el Caribe, la más segura de la región, una ciudad con historia, cultura y espacios para la recreación. Te invitamos a conocerla empezando por La Loma de Tiscapa, antigua Casa Presidencial en donde se alza majestuosa la silueta del General de Hombres y Mujeres Libres, Augusto C. Sandino, Héroe Nacional de Nicaragua.
Aquí, además de conocer sobre historia, puedes apreciar una fabulosa vista de la ciudad, de la laguna de Tiscapa y del lago Xolotlán, el segundo más grande Centroamérica y del país, así como también disfrutar de espectaculares y relajantes atardeceres.
Viaja en el tiempo visitando su centro histórico; la Plaza de la Revolución, el Palacio Nacional de la Cultura, que alberga importantes museos y bellos murales, y la Antigua Catedral Metropolitana de Santiago Apóstol, testigo mudo del devastador terremoto que azotó a Managua en 1972, pero que aún conserva destellos de su belleza arquitectónica.
En las inmediaciones, en la Plaza 22 de Agosto podrás disfrutar de riquísimos platillos tradicionales y presentaciones culturales en las ferias gastronómicas y de artesanías que se realizan todos los fines de semana.
A pocos metros de allí se encuentra el monumento al Príncipe de las Letras Castellanas, el Poeta Universal Rubén Darío, y el Teatro Nacional Rubén Darío, con una de las mejores acústicas de Latinoamérica.
No puedes dejar de conocer el Puerto Salvador Allende, un complejo turístico ubicado en el Malecón de Managua, donde puedes degustar de una variada oferta gastronómica nacional e internacional; caminar en su malecón, sentir la brisa del lago y disfrutar en un ambiente familiar. También puedes navegar de noche en las tranquilas aguas del lago en un ambiente festivo.
Admira las réplicas de casas históricas y de las principales iglesias del país, observa una maqueta a escala de La Vieja Managua, viva aún en la memoria de muchos capitalinos, y aprovecha para darte un refrescante chapuzón en el moderno Parque Acuático, todo esto ubicado en el Paseo Xolotlán.
Reta a tu adrenalina
Pero si lo tuyo es la aventura, vive una experiencia extraordinaria y única, deslízate sobre el volcán más joven de Centroamérica y uno de los más activos del país. La arena fina de la superficie del volcán Cerro Negro es ideal para practicar sandboarding.
Este coloso es una de las joyas turísticas de Nicaragua, ubicado en el departamento de León, es visitado anualmente por miles de turistas nacionales y de otras nacionalidades que buscan aventura extrema y experiencias auténticas e inolvidables.
Deslizarse sobre angostas tablas de madera desde su cima, con velocidades de hasta 60 kilómetros por hora, es verdaderamente excitante. Es en ese momento en que te enteras de que valió la pena escalarlo.
Además de apreciar impresionantes vistas panorámicas, puedes practicar ciclismo de montaña, caminatas, y canopy.
León te ofrece una gran cantidad de aventuras volcánicas. El volcán Telica, El Hoyo, y Momotombo, son algunos en los que puedes dar rienda suelta a tu espíritu aventurero.
El Diamante de la Segovia
Estelí, El Diamante de las Segovias, te da la bienvenida con su clima agradable. Ubicado al norte del país, es un valle rodeado de mesetas. Disfruta de la frescura y del verdor de sus montañas de este departamento donde se elaboran los mejores tabacos del país de fama y calidad internacional.
Si te encanta el contacto con la naturaleza no puedes estar en mejor lugar. Esta región ofrece saltos, ríos, lagunas, reservas naturales y petroglifos, y sobre todo una tranquilidad inigualable.
Una parada obligatoria en tu visita a esta región es el salto de La Estanzuela, una caída de agua de 40 metros de altura, en donde además de darte un refrescante chapuzón puedes practicar rapel y escalamiento.
En la Reserva Natural Tisey-Estanzuela disfrutarás de su bosque tropical de montaña, de exuberante flora y fauna. Convive con la cotidiana vida campesina y sus manifestaciones culturales en artesanías y gastronomía en las comunidades de La Estanzuela, La Garnacha, y La Tejera.
Enamórate del sonar del viento en los bosques de pino y roble, cuna del pájaro carpintero que con su canto te cautivará y asómbrate con los cerros que adornan el paisaje de la reserva.
No puedes marcharte sin conocer la Galería de Piedra El Jalacate, donde el artista Alberto Gutiérrez ha utilizado las paredes de piedra para crear más de un centenar de esculturas y dibujos en alto y bajo relieve. En este recorrido, guiado por el mismo don Alberto, escucharás interesantes historias sobre sus inspiraciones para realizar estas esculturas.
Otro sitio que te recomendamos es el Paisaje Terrestre Protegido Miraflor – Moropotente, ubicado a tan solo 30 kilómetros de Estelí, un lugar que te llenará de paz y tranquilidad, cuenta con una naturaleza desbordante donde las orquídeas se destacan por su belleza y colorido.
La tierra del Rondón y del Palo de Mayo
Bluefields es una ciudad turística y cultural, es puerta de salida a otros destinos de la costa caribe nicaragüense. Su población es pluricultural y multilingüe, descendiente de pueblos indígenas e inmigrantes afrocaribeños, rica en tradiciones ancestrales.
No puedes perderte su gastronomía caribeña, una fusión de sabores e ingredientes de culturas indígena, africana y mestiza, entre los que se destacan el rondón, un caldo que lleva plátanos, dasheen, yuca, fruta de pan, rallado de coco, leche de coco, añade cebolla, albahaca, orégano y sal al gusto.
En Bluefields en el mes de mayo realiza las festividades del Palo de Mayo. Esta muestra cultural, originada en el Siglo XIX, se ha mantenido a través de los años, y es la fiesta de mayor relevancia en la región.
Esta festividad se deriva de la antigua costumbre inglesa de realizar el primer día de mayo una fiesta para celebrar la llegada de la primavera, la finalización de la sequía e inicio de la época lluviosa cuando había agua para sacar la producción; de allí es que la danza del Palo de Mayo se convirtió en un homenaje a la fertilidad.
Son diversas las actividades que se realizan en los barrios de esta ciudad, pero los eventos centrales son a finales del mes para cerrar el 31 con famoso baile del Tulululu, una festividad que inicia en el histórico barrio Old Bank, ubicado en la zona norte, hasta llegar al barrio Punta Fría.