Jennifer Lopez y Ben Affleck han llegado a un punto crítico en su relación. Según TMZ, la comunicación entre ellos se ha vuelto tan fría y distante que el proceso de divorcio se ha ralentizado considerablemente.
El célebre medio de entretenimiento revela que “Ben y Jen no están hablando entre ellos, ni en persona ni por teléfono, y esto está ralentizando mucho su divorcio.”
A pesar de tener un acuerdo prenupcial que debería facilitar la separación, la venta de su lujosa mansión en Beverly Hills por 68 millones de dólares es uno de los pocos asuntos pendientes.
Mientras tanto, Ben ya ha comprado una nueva mansión en Brentwood por 20.5 millones de dólares, mientras Jennifer sigue buscando una nueva residencia. La falta de comunicación entre ellos es, según TMZ, el principal obstáculo para un divorcio rápido.
Sorprendentemente, ninguno de los dos ha contratado abogados de divorcio. Están gestionando la separación a través de sus gerentes de negocios, aunque este método no ha sido tan efectivo como esperaban.
Fuentes cercanas afirman que si la situación no mejora, es probable que recurran a abogados especializados para finalizar el proceso.
Los motivos detrás de la ruptura
Entre los factores que han llevado a esta crisis se encuentra el reciente lanzamiento de la línea de cócteles de Jennifer Lopez, Delola. Este proyecto habría generado tensiones, especialmente debido al historial de lucha contra el alcoholismo de Ben Affleck.
Un amigo del actor comentó al Daily Mail que “la marca de bebidas alcohólicas de Lopez fue una de las cosas que colmó el vaso”.
La promoción de estos cócteles fue vista como una ofensa personal por Ben, quien ha ingresado a rehabilitación en varias ocasiones desde 2001.
Este conflicto, junto con las diferencias en sus estilos de vida, exacerbó las tensiones. Jennifer, acostumbrada a la constante exposición mediática, siempre buscaba estar en el centro de atención, mientras que Ben prefería una vida más privada.
“Su obsesión con la fama se volvió demasiado para él”, explicó un insider al Daily Mail.
Los problemas financieros también jugaron un papel en la separación. El fracaso comercial del documental de Jennifer Lopez, This Is Me… Now: A Love Story, aumentó las fricciones.
Este proyecto, que buscaba capturar la esencia de su matrimonio, no tuvo el impacto esperado en el público ni en la crítica.
¿Qué sigue para Ben y Jen?
A medida que las tensiones continúan y la comunicación sigue rota, el futuro de esta pareja parece cada vez más incierto.
Si logran superar sus diferencias y mejorar la comunicación, podrían presentar las peticiones de divorcio y poner fin a su relación de manera definitiva.
Sin embargo, la historia de Jennifer Lopez y Ben Affleck, llena de altos y bajos, muestra que nada está escrito en piedra en el mundo de las estrellas de Hollywood.
