Miguel Ángel nunca quiso pintar la Capilla Sixtina. De hecho, incluso se negó, pero al final sucumbió al deseo de un insistente pontífice Julio II al que por algo se le apodaba el Papa Guerrero y hasta el Terrible. Cuando fue encargado, o condenado, tenía 33 años y ya era un artista consagrado al que los contemporáneos llamaban el Divino.
Con eso, casi todo está dicho. funciona como el Devoción del Vaticano o del David de Florencia habló por él. Es decir, obras escultóricas. Y es que Miguel Ángel era considerado sobre todo como escultor, y la pintura al fresco no figuraba entonces entre sus innegables virtudes.
Tal vez por un acto de rebelión o simplemente porque era tan brillante como parecía, las nueve escenas del Génesis en la famosa bóveda no corresponden del todo a la iconografía católica tradicional y aún hoy, los expertos creen haber descubierto mensajes, en su mayoría humanistas o heréticos. , que se escondía en el mismo corazón del Vaticano.
Uno de estos guiños se encuentra precisamente en una de las imágenes centrales, la que muestra la creación de Adán. Primero pinta a un Dios envejecido, semejante a los patriarcas de la Iglesia, mientras que hasta entonces se le representaba con el rostro de Jesús como imagen del Padre.
Y de cerca, vestido únicamente con una túnica rosa cuyo gesto busca acercarse a su creación, el hombre, y no al revés.
La forma en que el Creador da vida a Adán también es bastante innovadora, ya que los dos están casi al mismo nivel. Hay quien quiere ver en ella un mensaje que estaría completamente en la tradición de Miguel Ángel: Dios se sirvió del barro y de estas manos que ahora tiende para modelar, esculpir, al hombre, al que transmite con ese dedo extendido la capacidad creadora.
Lástima que el neoplatónico Miguel Ángel no escribió en un libro de artista todo el simbolismo del enorme fresco de proporciones bíblicas, de unos 460 metros cuadrados pintados a 20 metros del suelo.
Esto pondría fin a las teorías, algunas muy convincentes, y pasaría a las certezas.
A falta de ésta, una de las hipótesis que más fortuna ha hecho se relaciona con la forma del manto que envuelve a Dios y las figuras que lo acompañan. Un médico, al observar la escena, se dio cuenta de que todo este conjunto de ropas y cuerpos le resultaba muy familiar.
Específicamente, creyó ver la imagen de un cerebro humano y en 1990 publicó los hallazgos de su estudio en el Journal of the American Medical Association.
El Dr. Frank Lynn Meshberger ha argumentado de manera convincente que Miguel Ángel ilustró la anatomía de una sección del cerebro humano, y no solo su contorno, sino las superficies interna y externa, con elementos claramente identificables como el lóbulo frontal, el cerebelo o la óptica quiasma
Recuerda que un muy joven Miguel Ángel vivió mucho tiempo en el monasterio florentino de Santo Spirito para diseccionar los cadáveres en la morgue y así descubrir cada músculo del cuerpo humano, sin olvidar sus órganos internos.
Terminado el aprendizaje, obsequió al abad un delicado Cristo crucificado (cuyo modelo era un adolescente fallecido) para agradecerle la acogida y el riesgo que el religioso había asumido por él.
En ese momento, este tipo de autopsia estaba totalmente prohibido, aunque era bastante común entre los artistas.
Años después de la publicación de la teoría del Dr. Meshberger, otros médicos, en este caso los neuroanatomistas Ian Suk y Rafael Tamargo, publicaron en la revista Neurocirugía un segundo estudio que fue aún más lejos.
Según estos científicos, los posibles errores detectados en el tratamiento de las sombras, la caída de la ropa e incluso ciertas anomalías anatómicas en el cuello de Dios, detectadas por los historiadores del arte, serían en realidad recursos utilizados por Miguel Ángel para representar la médula espinal de forma camuflada.
Si eso es cierto, ¿qué pretendía hacer Miguel Ángel con él? Las hipótesis continúan: ¿Quiso demostrar lo bien que conocía la anatomía humana o tal vez buscó resaltar la importancia del cerebro, de la inteligencia, como motor de la creación, cualidad divina que el Creador legó a los seres humanos y nos acerca? ¿¿a él??