En el laberinto de decisiones que definen Hollywood, una historia resuena con el eco de un «no» que pudo haberlo cambiado todo. John Travolta, el icono de la pista de baile, estuvo a un paso de ser Forrest Gump, el hombre que corrió a través de la historia.
¿Por qué el actor que nos hizo vibrar con «Grease» y «Saturday Night Fever» dejó pasar la oportunidad de protagonizar una de las películas más icónicas de los 90?
En los años 90, Travolta buscaba un papel que lo devolviera a la cima. Tras el éxito de «Look Who’s Talking», la oferta de «Forrest Gump» parecía el billete dorado. Robert Zemeckis, el visionario director, lo quería a él para dar vida al entrañable Forrest. Pero, ¿qué llevó a Travolta a decir «no»?
El llamado de Tarantino
Mientras Zemeckis le ofrecía una superproducción, Quentin Tarantino le susurraba al oído un papel en «Pulp Fiction». Travolta, arriesgándose, apostó por el cineasta independiente. Vincent Vega le dio el renacimiento que necesitaba, pero, ¿fue la decisión correcta?
El destino quiso que Travolta y Tom Hanks, quien finalmente interpretó a Forrest, se enfrentaran en los Oscar de 1995. Hanks se llevó la estatuilla, pero Travolta vio su carrera resurgir.
«Pulp Fiction» se convirtió en un clásico de culto, mientras «Forrest Gump» arrasaba en la ceremonia.
¿Arrepentimiento o destino?
Travolta ha declarado que no se arrepiente de su decisión. «Si no hice algo que hizo Tom Hanks, entonces hice otra cosa que era igualmente interesante o divertida», dijo.
Ambas películas marcaron una época, pero, ¿qué hubiera pasado si Travolta hubiera aceptado el papel de Forrest?
Un legado de decisiones
La historia de Travolta nos recuerda que Hollywood es un juego de azar, donde las decisiones pueden cambiar el curso de la historia. ¿Fue su «no» un error o una jugada maestra? Solo el tiempo lo dirá.
