William Levy, el actor cubano que durante años fue considerado uno de los rostros más atractivos y encantadores del mundo del espectáculo latino, acaba de protagonizar un escándalo que tiene a todos hablando. ¡Y no es para menos!
El protagonista de novelas como Café con aroma de mujer y Vuelve a mí fue arrestado este 14 de abril en Weston, Florida, en circunstancias que parecen sacadas de una telenovela… pero no, esta vez no estaba actuando.
Según los informes policiales y testigos presenciales, William Levy llegó a un restaurante argentino ubicado en Weston, acompañado de amigos y rodeado de fanáticos. En un gesto que muchos consideraron generoso y carismático, muy a su estilo, Levy pidió que se sirvieran bebidas ¡a más de 100 personas! 🎉🍾
Todo parecía una celebración normal, incluso con toques de extravagancia. Pero el problema surgió cuando llegó la cuenta. Ahí, según el informe del Departamento de Policía de Weston, el actor se negó a pagar el monto total del consumo.
Los encargados del local intentaron hablar con él para resolver el malentendido, pero el tono de la conversación se elevó rápidamente. En medio de la discusión, Levy empujó a una persona que intentaba intervenir y calmar la situación.
El altercado fue tan serio que el personal del restaurante se vio obligado a expulsarlo del establecimiento.
Pero eso no fue todo…
Una vez fuera del restaurante, William Levy se percató de que había olvidado su celular adentro. Volvió al local para recuperarlo, pero ya se le había prohibido la entrada por su conducta previa.
Ahí fue cuando las autoridades locales hicieron su aparición. Levy fue arrestado por «intoxicación desordenada» y «entrada no autorizada a propiedad privada», dos cargos que pueden parecer menores, pero que colocan al actor en una posición incómoda ante el público, la prensa y… las marcas que trabajan con él.
Fue llevado a la cárcel del condado de Broward, y aunque quedó en libertad tras pagar una fianza de apenas 500 dólares, el daño ya estaba hecho. El incidente se viralizó, las redes explotaron, y los medios de comunicación no tardaron en poner el foco sobre la caída del galán.
No es la primera vez que William Levy es protagonista de rumores, controversias y titulares explosivos. El actor ya venía lidiando con una complicada separación de la también actriz Elizabeth Gutiérrez, con quien compartió más de 20 años de relación y tiene dos hijos.
En 2024, su divorcio ocupó las portadas de todas las revistas del corazón. Las versiones sobre infidelidades, distanciamiento y diferencias irreconciliables no tardaron en circular.
Y aunque ambos intentaron mantener la compostura en público, lo cierto es que la ruptura fue un golpe duro para su imagen de “galán perfecto y padre ejemplar”.
Ahora, con este nuevo episodio de violencia, agresividad y escándalo público, Levy parece alejarse aún más de esa figura impoluta que lo catapultó al estrellato.
¿Qué pasará con su carrera?
Hasta hace poco, William Levy parecía estar en un buen momento profesional. Su interpretación en la serie Montecristo fue elogiada, y su regreso a las telenovelas con Vuelve a mí generó altas expectativas. Incluso, se hablaba de proyectos internacionales, colaboraciones con plataformas como Netflix y nuevas oportunidades en el cine.
Pero ahora… todo está en pausa.
Las preguntas no paran de llover: ¿Será este el inicio del fin para William Levy? ¿Podrá limpiar su imagen o quedará marcado como otra celebridad más atrapada por el ego, el alcohol y los errores públicos?
Lo cierto es que, en el mundo del espectáculo, la línea entre la fama y el olvido es tan delgada como una copa de vino mal sostenida.
Como era de esperarse, las redes sociales estallaron. En cuestión de minutos, las palabras “William Levy” se convirtieron en tendencia.
Mientras unos usuarios lo defendían, argumentando que pudo haber sido un malentendido o una provocación, otros fueron más duros:
“¡Se le subió la fama a la cabeza!”
“Qué decepción… era mi ídolo.”
“De galán a problemático en 5 segundos.”
“Solo pagó $500 y salió. La justicia solo existe para los ricos.”
Lo cierto es que, le pese a quien le pese, el público está mirando con lupa todo lo que Levy hace… o deja de hacer.
En un mundo donde los errores de los famosos no se olvidan fácilmente, William Levy tendrá que moverse con mucho cuidado si quiere recuperar la confianza de su público y la industria.
Este incidente podría ser solo un tropezón… o el inicio de una caída en picada.
Todo depende de lo que haga a partir de ahora.