En un triste giro de los acontecimientos, la investigación sobre la inesperada muerte de Matthew Perry ha desvelado nuevos detalles que arrojan luz sobre este oscuro episodio. A medida que las autoridades continúan su investigación, surgen datos impactantes sobre las horas previas al fallecimiento del querido actor de ‘Friends’.
Fuentes policiales revelaron a TMZ que el cuerpo de Perry no permaneció por mucho tiempo en su bañera de hidromasaje antes de ser encontrado sin vida por su asistente en su residencia de Pacific Palisades el pasado sábado.
Perry, quien desempeñó el icónico papel de Chandler en la exitosa serie, no estaba completamente sumergido en el agua cuando se produjo el trágico descubrimiento.
Si bien esta información puede parecer sorprendente, tiene implicaciones significativas para determinar la causa oficial de su muerte. Perry se encontraba solo en el momento de su partida y había regresado a casa después de una intensa sesión de pickleball en el Riviera Country Club de Los Ángeles, un deporte que, según su entrenador, era una parte fundamental de su vida y un refugio que lo ayudaba a mantenerse sobrio y apoyar a otros en su lucha contra las adicciones.
Matt Manasse, su entrenador de pickleball, compartió con People su experiencia con el actor, destacando su competitividad y pasión por el deporte.
«El pickleball era su válvula de escape. Le hacía mucha ilusión. Era un tipo competitivo, y no en el mal sentido. Le encantaba. Quería ganar. Le encantaba. Cuando pegaba un tiro increíble, te lo contaba durante días», dijo Manasse emocionado.
Tras su partida del club de campo, Perry envió a su asistente en una misión para comprar un iPhone nuevo y unas gafas de prescripción. Sin embargo, cuando el empleado regresó a su hogar, hizo el descubrimiento aterrador de encontrar al actor inconsciente en su jacuzzi.
La llamada al 911 se realizó de inmediato, pero lamentablemente, los esfuerzos de los paramédicos fueron en vano.
En el registro de la residencia de Perry, se encontraron varios medicamentos recetados, como antidepresivos, medicamentos para la ansiedad y tratamientos para la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), una afección comúnmente asociada al tabaquismo.
Perry había admitido previamente haber sido fumador durante gran parte de su vida, lo que arroja luz sobre la presencia de estos medicamentos. Además, se hallaron parches y chicles Nicorette, indicando su firme determinación por dejar de fumar y cuidar su salud.
Aunque las autoridades de Los Ángeles descartaron la presencia de narcóticos y drogas ilegales, la causa oficial de la muerte de Matthew Perry aún no ha sido determinada por el forense del condado de Los Ángeles.
Se espera que los resultados de los exámenes toxicológicos estén disponibles en al menos seis semanas, lo que mantiene en vilo a sus seguidores y colegas.
La espera es crucial para esclarecer el misterio que rodea la partida de una estrella que dejó un legado imborrable en la televisión y el cine, y que será recordado con cariño y admiración por generaciones.