Desde que la relación entre Shakira y el apuesto futbolista Gerard Piqué llegó a su fin, el mundo ha sido testigo de una serie de lanzamientos musicales que han dejado a todos preguntándose si las letras ocultan indirectas dirigidas a su expareja.
Una de las más candentes, «Session 53», en colaboración con Bizarrap, desató una tormenta de memes y críticas hacia la famosa colombiana. Pero Shakira no se queda atrás y se defiende con uñas y dientes.
En una reciente e íntima conversación con la revista Billboard, Shakira abrió su corazón y reveló que estas canciones son su manera de liberar las emociones que atormentaron su alma en tiempos de turbulencia emocional.
«¡No soy una diplomática de las Naciones Unidas!», exclamó con pasión. «Soy una mujer, una loba herida. Me ha sorprendido poder convertir los limones más amargos en limonada».
Incluso enfrentó la presión de su círculo cercano que le instaba a cambiar la letra de «Session 53» antes de su lanzamiento. Pero Shakira se mantuvo firme, decidida a mantener su autenticidad y su necesidad de expresarse a través de la música.
«No pensé que tendría tanta fuerza para superar ciertas etapas de la vida. La música es mi tabla de salvación», confesó.
Pero no todo es tormento y desdicha en la vida de Shakira. En este momento de su carrera, se encuentra llena de vitalidad y creatividad.
«Estoy muy inspirada, con ganas de más», dijo con una chispa en sus ojos. «Hubo tiempos en que me arrastraban al estudio. Todos tienen momentos de conflicto con su trabajo, pero ahora estoy en una luna de miel con mi música y mi carrera. Estoy enamorada de lo que hago».
Las canciones de Shakira pueden haber sido provocativas y controvertidas, pero son un reflejo apasionado de su vida y emociones en constante cambio. La historia de una loba herida que ha encontrado su voz en medio de la tormenta.